Mecanismos de defensa ¿qué son?

Desde la psicología y la psicoterapia los mecanismos de defensa son una parte fundamental de las personas; forman parte del carácter y de la personalidad y se adquieren en los primeros años de vida. Cómo dice su palabra una de sus funciones es defenderse, pero, ¿de qué?

Llegamos a un mundo nuevo que no conocemos y aprendemos a protegernos de aquellas cosas que nos resultan amenazantes. Los mecanismos nos permiten evitar situaciones o acciones que nos ponen en estados de alerta, situaciones donde nos sentimos atacados o desprotegidos. Son herramientas para solventar de la mejor manera posible diversas situaciones y sobrevivir en un mundo que nos resulta difícil.

Un mecanismo puede entenderse como un patrón de conducta, pensamiento y actitud que opera con una finalidad. Algunos mecanismos impiden sentir, otros dificultan expresar mientras que otros interfieren en la toma de conciencia. Según sea el mecanismo se evitan unas cosas u otras. De esta manera se convierten en estrategias para manejar los conflictos, relacionarse o evitar el dolor.

Frente a algunas situaciones de nuestra vida empleamos los mecanismos sin darnos cuenta, procedemos de la “misma” manera una y otra vez. A veces son como automáticos que se disparan, realmente no queremos actuar, expresar, callar o sentir de esa manera, por otra parte parece que se escapa de nuestro control.

No recordamos cuando aprendimos a ser así, simplemente somos así, “esta forma de ser viene de serie” nos decimos, quién no ha oído alguna vez la típica frase de: “soy así, que le vamos a hacer!”

Aprendimos a manejarnos de esta manera, esto nos resultó útil cuando éramos niños, pero ahora nos encontramos con que interfiere y nos hace sufrir, ya no nos sirve. Aún así, continuamos con ellos, no sabemos cómo hacerlo de otra manera. Es como si cerrásemos una puerta y olvidásemos donde hemos puesto la llave, de esta manera, tenemos la llave en algún lugar y no conseguimos abrir la puerta.

Algo que marca la diferencia entre un mecanismo y un comportamiento es la elección. ¿Tenemos la sensación real de estar eligiendo? ¿Reaccionamos o respondemos ante las situaciones? Quizás sea una pregunta que nos lleve a ampliar la conciencia y nos permita elegir responder.