“Una persona cambia por dos razones: aprendió demasiado o sufrió lo necesario”. Esta frase que probablemente hayas escuchado y cuyo autor desconozco se aproxima bastante a los motivos del cambio en las personas.
Cualquiera de las dos opciones lleva al cambio, aunque como siempre, la regla trae consigo la excepción.
Cuándo hemos aprendido demasiado o cuándo hemos sufrido lo necesario son cuestiones que decide cada uno. De esta manera hay personas que piensan que ya lo han aprendido todo y esto les impide darse cuenta de lo que realmente no saben y otras que parece que nunca acaban de sufrir.
La conciencia o el darse cuenta es algo que no termina nunca. Es algo así como hacer deporte o ir al gimnasio, uno no trabaja su cuerpo durante un año y pretende que eso le dure toda la vida…si no lo retoma acaba desapareciendo. Ahora sí, a medida que va entrenando su cuerpo responde cada vez más, tiene más fuerza y le permite ampliar su resistencia, flexibilidad, potencia, etc.
Con la conciencia ocurre igual. Uno va aprendiendo a observarse a sí mismo y a los demás de una manera objetiva, va conociéndose cada vez más, conociendo su forma de proceder, sus automatismos o mecanismos de defensa, sus emociones (sus emociones genuinas y sus emociones secundarias, puedes ampliar información aquí).
Pero uno no puede pretender darse cuenta una temporada y después olvidarse y no sufrir. La vida se vive y se disfruta de una manera auténtica si uno está despierto y la vive en su intensidad. No es lo mismo imaginar besar que besar.
Al principio parece que el darse cuenta y tomar conciencia es difícil o quizá innecesario ya que uno se da cuenta de algunas cosas que le gustan y de otras que no le gustan tanto. Es típico oír sobre alguien ´es feliz, ignora lo que le pasa´, o ´no se entera´. En parte tiene razón, es feliz en el corto plazo, pero en el largo esa felicidad se transforma en sufrimiento, ya que la inconsciencia hace que repitamos, en un intento de vivir felices, viejas pautas que han dejado de ser eficaces.
A medida que uno se va descubriendo es realmente emocionante… Una de las cosas más interesantes de la conciencia es que el hecho de darse cuenta de cómo uno vive las relaciones, el amor, el trabajo…como uno siente lo que siente, o como uno se limita de la manera en la que lo hace ofrece recursos para hacerlo de otra manera. Nada más acertado que esa frase que dice ´en el problema está la solución´.
Como dice Jung: “Hasta que el inconsciente no se haga consciente, el subconsciente dirigirá tu vida y tú le llamarás destino”.
Feliz viernes!
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